El alcohol es la droga psicoactiva de consumo más extendida en España (y en el mundo), siendo el tercer factor de riesgo más importante para la salud, tras el tabaco y la hipertensión arterial, e induciendo trastornos psiquiátricos severos. World Health Report, 2002, OMS.
¿Cómo afectan a las personas los trastornos por consumo de alcohol?
Si bien algunas investigaciones sugieren que pequeñas cantidades de alcohol pueden tener efectos cardiovasculares beneficiosos, existe un consenso generalizado de que tomar mucho puede provocar problemas graves de salud. De hecho, 100.000 personas en los Estados Unidos mueren por causas relacionadas con el alcohol cada año. Los efectos a corto plazo que se producen por el consumo abusivo del alcohol pueden ser pérdida de memoria, resaca y amnesia alcohólica.
Los problemas a largo plazo asociados con el consumo excesivo de alcohol incluyen trastornos gastrointestinales, patologóa cardíaca, cáncer de esófago, cáncer de garganta, daños cerebrales, pérdida de memoria grave y cirrosis hepática.
Los problemas con el alcohol también tienen un impacto muy negativo en la salud mental. El abuso de alcohol y el trastorno por dependencia al alcohol pueden empeorar patologías psiquiátricas ya existentes o provocarlas, como la depresión o la ansiedad.
Los estudios demuestran que: las esposas y los hijos de las personas con problemas de alcohol experimenten violencia familiar así como que los niños enfrenten abuso físico y sexual, abandono y desarrollan problemas psicológicos en la edad adulta.
¿Cuándo se debe buscar ayuda?
La mayoría de las personas con problemas de alcohol ocultan su consumo de bebidas alcohólicas o niegan tener un problema.
Es importante buscar ayuda profesional, y que sea el médico quién tras una entrevista clínica evalúe su problema y valore si existe o no la necesidad de un tratamiento por problemas de alcohol
Criterios diagnóstico para el abuso del alcohol (DSM-IV)
Patrón desadaptativo de abuso de alcohol que conlleva un deterioro o malestar clínicamente significativos, manifestado por uno (o más) de los siguientes puntos, durante un período de 12 meses:
- Consumo recurrente de alcohol, que da lugar al incumplimiento de obligaciones en el trabajo, la escuela o en casa (p. ej., ausencias repetidas o pobre rendimiento laboral relacionados con el consumo de la sustancia; ausencias relacionada con la sustancia, suspensiones o expulsiones de la escuela; descuido de los niños o de las obligaciones del hogar)
- Consumo recurrente del alcohol en situaciones en las que hacerlo es físicamente peligroso (p. ej., conducir un automóvil o accionar una máquina bajo los efectos de la sustancia)
- Problemas legales repetidos relacionados con el alcohol (p. ej., arrestos por comportamiento escandaloso debido al alcohol)
- Consumo continuado del alcohol, a pesar de tener problemas sociales continuos o recurrentes o problemas interpersonales causados o exacerbados por los efectos del alcohol (p. ej., discusiones con la esposa acerca de las consecuencias de la intoxicación, o violencia física)
En Consulta Iglesias no planteamos tratamientos estandarizados con la etiqueta de «enfermo», nuestra método de trabajo basado en la evidencia científica se basa en la terapia individual y en la prestación de los servicios de la más alta calidad.
Nuestro equipo interdisciplinar diseñará con usted una estrategia terapéutica personalizada. Incorporamos los últimos avances científicos a los abordajes terapéuticos que mejor se ajusten a tus necesidades para adaptar su tratamiento contra el alcohol.