Según los investigadores, los medicamentos que son usados normalmente para tratar la depresión, la ansiedad y el trastorno obsesivo compulsivo (Antidepresivos ISRS) pueden mejorar el estrés en personas con enfermedades cardíacas.
La depresión está directamente relacionada con frecuencia a las enfermedades cardiovasculares. Diversos mecanismos psicoinmunoneuroendocrinos explican la interacción entre depresión y enfermedad cardiovascular. Es necesario reconocerla y tratarla correctamente para mejorar la calidad de vida de estos pacientes y prevenir su evolución cardiológica.
Ambas enfermedades presenta un denominador común, el estrés. Es importante que personas que han padecido una enfermedad cardíaca cambien determinados hábitos de su vida, como no fumar, mejorar la alimentación y la reducción del estrés, pero el sólo hecho de presentar un ataque cardíaco o una enfermedad del corazón produce nerviosismo o estrés por miedo a lo que pueda suceder.
Los pacientes que tomaron antidepresivos ISRS comparados con personas a las que les administró un Placebo, fueron 2,5 menos propensos a tener estrés mental inducido por un infarto de miocardio, una enfermedad cardíaca provocada por el estrés mental. Los resultados, publicados en boletín de Mayo 22/29 2013 del Periódico americano de la asociación médica, añaden al conocimiento actual cómo las emociones negativas afectan la salud cardiovascular.
“El estrés que produce un infarto de miocardio es una enfermedad seria ya que los pacientes con esta enfermedad tienden a padecer peores problemas comparados con los pacientes sin él” dice el autor principal Wei Jiang, M. D., profesor asociado de ciencias psiquiátricas y del comportamiento y de medicina interna en Duke. “Este estudio muestra por primera vez que es tratable con una modulación de la medicación emocional”.
El MSIMI (siglas de Mental Stress-Induced Myocardial Ischemia) se ha diagnosticado en base a ciertos cambios en el corazón: nuevo movimiento anormal de las paredes, una reducción de la cantidad de sangre bombeada por el ventrículo derecho, cambios escémicos en los electrocardiogramas o una combinación de estos tres síntomas. Los investigadores refiren que: tratamientos con ISRS son efectivos y desempeñan una gran función protectora en paciente con una patología coronaria.