La depresión posparto es el cuadro depresivo que se inicia en las primeras doce semanas tras el parto, esta patología también conocida como depresión postnatal.

Síntomas de la depresión posparto son ansiedad, tristeza, y labilidad afectiva

Algunas mujeres a las dos semanas del parto comienzan  con un sentimiento de ansiedad, irritación, tristeza con llanto e inquietud. Estos síntomas son denominados «depresión puerperal». En muchas ocasionas estos síntomas depresivos desaparecen a los pocos días sin necesidad alguna de tratamiento. Los médicos consideran baby-blues «a la existencia de una alteración leve en el estado de ánimo de la madre puérpera.

Se denomina depresión posparto a la depresión puerperal que no desaparece o cuando los signos de depresión comienzan uno o más meses después de dar a luz.

La causa más frecuente es el gran cambio que se produce con la llegada de un niño, con síntomas depresivos típicos: tristeza, sentimientos de desesperanza y de minusvalía, insomnio, pérdida de apetito, lentitud de movimientos, pensamientos recurrentes de muerte, síntomas físicos varios —molestias digestivas, dolor de cabeza, fatiga—, ansiedad elevada, etc. En caso de aparecer esta sintomatología y durar varios días seguidos es conveniente consulta a un médico.

Los factores de riesgo más importantes

  • Pacientes que durante el embarazo presentan frecuentes episodios de ansiedad o depresión particularmente durante el tercer trimestre.
  • Antecedentes de depresión o ansiedad previamente.
  • Historial familiar de depresión o ansiedad.
  • Falta de apoyo social o familiar
  • Dificultades en el matrimonio.
  • Una baja autoestima.
  • Un embarazo no deseado o planeado.
  • Madre soltera
  • Paciente con consumo de alcohol, alucinógenos o fuma
  • Tiene problemas financieros o de vivienda.

Síntomas de la Depresión posparto

  • Agitación e irritabilidad, disforia
  • Cambios en el apetito, aumento o descenso
  • Sentimiento de inutilidad o de culpa
  • Retraimiento social
  • Falta de placer o interés en todas o en la mayoría de las actividades
  • Pérdida de la concentración
  • Pérdida de energía
  • Problemas para realizar las tareas en el hogar o el trabajo
  • Ansiedad a lo largo del día
  • Pensamientos de muerte o suicidio
  • Dificultad para dormir
  • Tener sentimientos negativos hacia el bebé o incluso pensar en hacerle daño. (Aunque estos sentimientos son aterradores, nunca se materializan. No obstante, usted debe comentarle al médico al respecto inmediatamente
  • Desinterés por el recién nacido

Muchos estudios científicos apuntan que la depresión posparto esté relacionada con los cambios hormonales que tienen lugar en el momento del nacimiento del nacimiento concretamente con la salida de la placenta y los cambios que se producen para la lactancia.

Aunque los niveles de estrógenos, progesterona y otras hormonas relacionadas con la reproducción que pueden afectar a las emociones descienden bruscamente tras el parto (momento de la expulsión del la placenta), no se han encontrado diferencias entre las hormonas de las madres que desarrollan una depresión posparto y las de las que no. Una de las posibles explicaciones es la sensibilidad que puedan tener algunas mujeres a los cambios hormonales.

Tratamiento de la depresión posparto

Los psiquiatras no siempre prescribimos tratamiento farmacológico para los paciente con depresión posparto. En los casos necesarios se utilizarán Antidepresivos.

En algunas ocasionas también se puede realizar un tratamiento con les parece más atractiva la posibilidad de recibir tratamiento con hormonas en lugar de con antidepresivos. Sin embargo, las evidencias disponibles sobre su eficacia son cuestionables y además no están exentas de efectos secundarios.

La progesterona parece funcionar mejor en supositorios, mientras que los estrógenos se aplican actualmente en forma de parches en la piel.

En caso de tener la sospecha de padecer esta patología, póngase en tratamiento.

En Palma de Mallorca, Consulta Iglesias ofrece asesoramiento inmediato para pacientes que pudieran padecer Depresión posparto